Que vivimos tiempos anormales es la tónica de este verano, y conseguir un sitio para tomar un buen vino en Sanxenxo es una labor casi imposible, pero a base de buscar y estar atentos logramos por segunda vez una mesa en el restaurante Casa Roman, que está debajo del Hotel Casa Román-lugar que apreciamos mucho por haber quedado en el hotel y por conocer a su dueño Eugenio y a sus sobrina que tiene el restaurante "Los barcos". Allí el día que llegamos pudimos disfrutar de un buen vino de rioja viendo el mar y ayer también lo pudimos lograr poniendonos muy contentos.
Llegó la camarera y nos mantuvimos de pie hasta que limpiara la mesa y sillas de los anteriores que acababan de marchar. Ya no nos limpió las sillas y cuando le pedimos los riojas que tenía, la chica nos tuvo que confesar que era su primer día y que no tenía ni idea. Le dejamos que fuera a buscarlos o nos dijera las marcas que tenía para tomar un buen vino, sabíamos que tenía Ramón Bilbao edición espcial a 3,50€ que estaba estupendo e íbamos a repetir..Después de varios minutos largos volvió sin nada en las manos y nos comunicó que aquella mesa no era para tomar vinos sino para cenar. La chica no tiene culpa ninguna pues seguía órdenes de sus jefes, pero creo que en esta ocasión y con la que está cayendo, Casa Román perdió para mí todas sus opciones de califar a un buen restaurante. Llevarán mucho tiempo en la restauración pero o están muy sobrados o realmente están hartos de trabajar y es más fácil ir a lo seguro y así no tienen que limpiar tantas mesas ni tantas sillas. Amén para Casa Román y sus muchos negocios, hay muchos otros. Por cierto después de más de media hora que pasamos por allí la mesa seguía libre, pues en aquella media hora habrían sumado a su cajar 7 € y tendrían a un consumidor en sus filas.
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